lunes, 15 de septiembre de 2008

JUAN JOSÉ MESTRE


LAS ROSAS

Un equinoccio que se acerca, la vida obstinando azules, el canto lejano de una ronda perfumada de morriñas, ese acostumbrado trinar del jilguero enamorado, la brisa fresca cargada de ozono vivificando noches y tu mirada sobre los últimos versos que tal vez escriba aquí, donde florece la inaugural rosa de tu vientre…

3 comentarios:

Anónimo dijo...

FELICITACIONES POR ESTA PROSA!!!
NORMY P.

juan jose mestre dijo...

Gracias mi querida Norma por tu generosidad de publicar mes a mes mis escritos.
Muy honrado,
Juanjo

Anónimo dijo...

Bello texto, lleno de esplendor.
Víctor Hugo Tissera